Hola, diario. Hoy jugó nuestro equipo. Pablo quiso que lo veamos juntos por la tele. Nosotros dos. No invitamos a nadie. Viste que mucho no me puedo concentrar... pero lo vi de a pedacitos. No nos fue nada bien. De a poco, vi cómo Pablo se iba enojando cada vez más. Gritaba mucho y su ceño se fruncía tanto que temí que se convierta en perro. Con un tono muy feo decía cosas como "lora", "parió", "pelotudo"... y tantas otras. Por momentos me quedé observándolo porque, frente al televisor, él también se convertía en un espectáculo.
Nuestro equipo perdió. Y a juzgar por el enojo de Pablo, nos humillaron. Estamos chinchudos*. Tengo ganas de ir a mear todo el territorio de esos que nos ganaron. Pero no sé si vale la pena. Es sólo una pelota. Un juego.
*Enojados
jajjaj No dejá!...Es solo un juego, vos bien lo decís...Hya mucha tristeza por que los argentinos somo así...Ya estábamos acariciando la copa...Para ya llegará de eso no hay dudas.
ResponderEliminarFUE UN EQUIPAZO...Y nos volvemos con la frente bien en alto
Francisco: tanto Pablo como varios de nuestra generación hemos tenido el privilegio de ver jugar a Diego Maradona, de ver a los buenos tenistas argentinos al os buenos boxeadores a los queridos Titanes... de ver el cambio de siglo... nuestra generación está mas que hecha, todo lo que venga será bueno de acá en más y sin dudas el fúutbol da revanchas, ya lo verás a Pablo y a este país celebrar de nuevo!!
ResponderEliminar